Texto de julio 2011

A veces no se por que los humanos actuamos como actuamos. Somos la única criatura del planeta que no le basta con ser simplemente lo que es, desde el momento en que nacemos gastamos toda nuestra vida en transformarnos a nosotros mismos, adoptando protocolos sociales, absorbiendo conocimiento y costumbres que inventamos a lo largo del tiempo. No se si eso es malo o bueno, pero me llama la atención cuando me comparo a mi mismo con un pájaro.

El pájaro no parece necesitar nada mas que ser el mismo, el es un pájaro y con eso basta, no necesita nada mas. entonces ¿por que es malo ser solo yo? ¿por que para vivir en este mundo necesito aprender, actuar, reprimir lo que me hace ser humano?

Desde pequeño aprendí que llorar era para débiles, que reír sin una “buena razón” era de tontos, me enseñaron que tenia que saber “ubicarme” y como debía comportarme en situaciones determinadas… Todas cosas muy necesarias en este mundo.. o no?.

Poco a poco me di cuenta que parecía ser al revés, admiraba la fortaleza de los que podían llorar sin freno y me di cuenta que cada lagrima que no había soltado a lo largo de los años era como una herida en mi interior, que estaba oculta, pero que seguía doliendo. Me di cuenta que eran tontos los que nunca reían, por que la vida te da motivos para hacerlo a cada momento y eran idiotas los que no podían notarlo.

Al final descubrí que nada de lo que me habían enseñado me servia realmente. Al parecer solo era necesario ser yo.